Entregan recomendaciones en Foro Internacional realizado en Perú
Servindi – Más de sesenta mujeres indígenas de diferentes países y continentes demandaron priorizar la tenencia y titulación colectiva de sus tierras y territorios como parte del desafío global de enfrentar el cambio climático que asola a la humanidad.
Observaron que “la parcelación individual y la fragmentación del territorio comunal debido a las políticas e intereses económicos extingue a nuestras comunidades y pueblos indígenas”.
Las mujeres culminaron un taller de dos días de duración en el que elaboraron un conjunto de recomendaciones con la participación de lideresas indígenas de Bolivia, Colombia, Costa Rica, Camerún, Ecuador, Filipinas, Guatemala, India, Liberia, Nicaragua, Panamá, Perú y Senegal.
El fundamento de las peticiones es que las mujeres indígenas y de comunidades desempeñan un rol decisivo en la gobernanza de los territorios y recursos naturales y son el eje de la sostenibilidad familiar y comunal.
Ellas guardan una estrecha y especial relación con la Madre Tierra, concebida no como un bien inmaterial individual sino como el bien común de propiedad colectiva que provee de servicios y alimentos.
Es además el espacio indivisible en el que plasman sus saberes, identidad y reivindican el legado de sus ancestros.
Enfoque diferencial y de género
Otra demanda es incorporar la visión de las mujeres indígenas y el enfoque diferencial y de género en las políticas, planes y programas y asegurar la aplicación de las normas que protegen sus derechos colectivos a la libre determinación y el consentimiento previo, libre e informado.
También demandaron participar de forma igualitaria o paritaria en los diferentes espacios de toma de decisión en igualdad de condiciones y asegurando los recursos necesarios.
Otro punto concierne a la gestión integral de los territorios y bienes naturales incorporando la sabiduría ancestral, en particular de las mujeres, “quienes desde las prácticas culturales” transmiten los conocimientos ancestrales a las futuras generaciones.
Hacia un nuevo orden sostenible
Señalan que enfrentar el cambio climático demanda “un nuevo orden político y económico” y la transformación de la economía, abandonando la dependencia en los hidrocarburos.
En tal sentido proponen “revisar, controlar y regular las actividades extractivistas e industriales contaminantes, generadoras de gases de efecto invernadero, y promover las actividades económicas sostenibles con el ambiente y el Buen Vivir”.
Piden asimismo priorizar la adaptación comunitaria en los territorios indígenas con la activa participación de la mujer a fin de asegurar la conservación y recuperación de los ecosistemas y la biodiversidad.
Recomendaron que los Estados enfaticen el agua, la agricultura y la alimentación como aspectos básicos para la salud y el desarrollo humano sostenible en las políticas y estrategias sobre el cambio climático.
El Taller-Foro Internacional
El evento que colmó el auditorio del Hotel Carrera fue organizado por la Organización Nacional de Mujeres Indígenas Andinas y Amazónicas del Perú (ONAMIAP), la Asociación Interétnica de Desarrollo de la Selva Peruana (AIDESEP) y la Iniciativa para los Derechos y Recursos (RRI, por su sigla en inglés).
Entre las autoridades peruanas estuvieron Marcela Huaita, viceministra de la Mujer y Poblaciones Vulnerables; Patricia Balbuena, viceministra de Interculturalidad; Sara Yalle, de la dirección forestal del Ministerio de Agricultura y Riego; Ernesto Ráez, asesor del ministerio del Ambiente y Carlos Briceño, del ministerio de Relaciones Exteriores.
Todos los representantes -sin excepción- reconocieron la justicia de los planteamientos expuestos y se comprometieron a considerarlos en sus respectivos portafolios.
Las encargadas de presentar las recomendaciones fueron las lideresas Ruth Buendía Mestoquiari, de la Central Asháninka del Río Ene (CARE), de Perú, y Blanca Chancosa Sánchez, representante de la Confederación Kiwchua del Ecuador (Ecuarunari).
Las palabras de clausura estuvieron a cargo de Rosilda Nunta, director del Programa Mujer Indígena de AIDESEP; Omaira Bolaños Cárdenas de RRI y Gladis Vila Pihue de ONAMIAP.
Pihue culminó su intervención demandando un compromiso personal de los funcionarios a fin de tejer una red de compromisos capaz de cambiar la situación que por factores burocráticos o institucionales es difícil de modificar.