Terminó una larga disputa entre nativos americanos y al interior de la comunidad científica al determinarse genéticamente que el hombre de Kenneweick, un esqueleto masculino de 8500 años de edad hallado en 1996 en el río Columbia, estado de Washington, pertenece a un hombre indígena nativo americano. Así lo destacó la Universidad de Copenhagen el 18 de junio al revelar los resultados.
La Gran Época/Servindi, 21 de junio, 2015
“Un nuevo estudio basado en la secuencia del genoma muestra que el hombre de Kennewick es de hecho más estrechamente relacionado con los nativos americanos modernos, que a cualquier otra población en todo el mundo”, dice el documento publicado el 18 de junio.