Hostilizan a dirigente kichwa y frustran su reunión con el Estado por contaminación de Pluspetrol

Lo detienen y liberan a un día previo del 5 de junio  por órdenes de Pluspetrol, denuncia Aidesep

Servindi – Alrededor las 6:30 de la mañana José Dence Fachín Ruiz, dirigente indígena amazónico de la etnia kichwa, fue detenido por efectivos policiales cuando llevaba a su menor hija a su centro de estudios en la ciudad de Iquitos. Luego, debió ser liberado al promediar las 2 de la tarde al no verificarse que existan razones válidas para su detención.

Según contaron testigos del hecho, el líder de las cuencas de los ríos Tigres y Pastaza fue intervenido por un grupo de policías vestidos de civiles, cerca al cruce del jirón Atlántida y la avenida del Ejército; para luego ser conducido junto a su hija en el patrullero al distrito de Nauta.

Los oficiales informaron que el arresto se debió su supuesta inasistencia a rendir su manifestación por el proceso que se le sigue a él y otros comuneros, a raíz de las protestas contra la empresa petrolera Pluspetrol Norte en Andoas, en marzo de 2008.

Se debe recordar que las protestas se realizaron en contra de los abusos de la empresa Pluspetrol Norte y por este motivo Fachín estuvo preso junto a más de cincuenta dirigentes indígenas en el penal San Jacinto de Guayabamba, en Iquitos.

Liberación

Una vez en el Juzgado de Nauta, el abogado de Fachín Ruíz, Jorge Tacuri Aragón,  exigió que se le presente a su defendido las notificaciones previas a la orden de detención.

Sin embargo, el magistrado no pudo demostrar la existencia de los documentos y tuvo que ordenar la inmediata libertad del comunero.

No obstante, lo alarmante del caso es que hoy Fachín Ruíz debía reunirse con representantes del Estado, para dar a conocer sus reclamos y pedir el retiro de Pluspetrol del lote 1AB, a causa de la actual contaminación ambiental en la zona.

Cabe destacar que numerosos estudiantes universitarios, representantes de organizaciones sociales y de diversos sectores de la ciudadanía loretana se manifestaron en el frontis de la comisaria exigiendo la libertad del líder indígena.

Del mismo modo la Asociación Interétnica de Desarrollo de la Selva Peruana (Aidesep) difundió rápidamente un pronunciamiento denunciando la acción de hostilización policial como una “intervención arbitraria y abusiva por parte del Estado”.

Observó que detrás de esta arbitrariedad se encubre una política de despojo que prioriza la inversión en industrias extractivas atropellando los derechos individuales y colectivos de los pueblos indígenas, privándolos del derecho ancestral de aprovechamiento de sus territorios.

Represalia de Pluspetrol

Ante lo sucedido, Jorge Pérez Rubio, presidente de la Organización de Pueblos Indígenas del Oriente (ORPIO), consideró que la detención “significó una represalia por parte de Pluspetrol”.

Por otro lado, el abogado Juan Carlos Ruíz Molleda del Instituto de Defensa Legal (IDL) opinó a través de las redes sociales que un juez que ordena una detención, aún sin notificación, incurre en una inconducta funcional por no permitir el derecho a la defensa.

Al respecto Ruiz Molleda sugirió denunciar al juez ante la Oficina de Control de la Magistratura (ODECMA) a fin de no dejar pasar por alto este tipo de irregularidades.