La Asociación Canadiense de Salud Pública (CPHA, por sus siglas en inglés) solicitó al Gobierno federal efectúe las investigaciones de los más de mil casos de mujeres indígenas desaparecidas y asesinadas durante las últimas décadas en el país.
Mediante un pronunciamiento, la CPHA se sumó así al pedido de varias organizaciones indígenas que reclaman respuestas sobre las mil 186 mujeres indígenas canadienses desaparecidas y asesinadas desde el año 1952. De esta cantidad, mil 17 perdieron la vida entre los años 1980 y 2012.
La organización demandó que se evalúen las medidas adoptadas como resultado de las numerosas investigaciones y reportes realizados sobre este tema.
Cuestiona en ese sentido que pese a existir documentos con recomendaciones para afrontar la muerte y desaparición de estas mujeres, no hay registro de su implementación, ni de su impacto para remediar la situación.
Por otra parte, la organización exigió que se desarrolle y ponga en marcha el plan integrado de acción para la prevención de las causas más profundas de la violencia, tal como lo recomendó la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Dicho plan debería estar liderado por las organizaciones indígenas y debería comprometer a todos los niveles del gobierno y la sociedad civil, señaló la CPHA.
Vivir con la violencia
La CPHA indicó que vivir con la violencia o con el temor de la violencia, se opone a las condiciones y los recursos fundamentales necesarios para lograr una salud óptima.
Afirmó que en Canadá la violencia no ha sido identificada como un problema prioritario de salud. Por ello consideró fundamental tener un enfoque de salud que entienda la complejidad del problema y que reduzca su incidencia.
“Gente marginal”
En declaraciones recogidas por la prensa, la vicepresidenta de la CPHA, Magali San Martín, señaló que la policía resta importancia al significativo número de mujeres desaparecidas.
Indicó que los efectivos se refieren a las indígenas como “gente marginal”, hecho que origina una sensación de impunidad en quienes cometen crímenes contra ellas.
En tanto que Audrey Huntley, de la organización “No Más Silencio”, afirmó que la impunidad en los asesinatos y desapariciones agudiza el problema.”El asesinato de mujeres indígenas es parte de una visión colonizadora en Canadá que considera que ellas son objeto de violación”, anotó.
Llamado a la acción
La Asociación Canadiense de Salud Pública consideró que es tiempo de evaluar los informes que se tienen del problema y llevar a cabo las recomendaciones que indican.
Precisó que esto deberá ser realizado de manera paralela a las investigaciones y con la participación de los tres grandes grupos indígenas reconocidos por la Constitución canadiense: Las Primeras Naciones, el pueblo Inuit y los Métis.
La CPHA
La Asociación Canadiense de Salud Pública es la única organización no gubernamental, independiente y voluntaria enfocada en la salud pública de Canadá.
Su misión es aportar a la mejora de la salud personal y de la comunidad, siguiendo los principios de salud pública para la prevención de enfermedades, promoción y protección de la salud y políticas públicas saludables.