Servindi, 18 de julio, 2011.- Cincuenta delegados indígenas procedentes de los estados Amazonas, Bolívar y Delta Amacuro participaron la semana pasada en el primer taller nacional de análisis y construcción de estrategias a implementar, frente a los proyectos de infraestructura previstos en la Amazonia venezolana.
El evento desarrollado en la Casa de la Diversidad Cultural, en la ciudad Bolívar, analizó el posible impacto de proyectos de infraestructura como un puerto de aguas profundas en el Delta del Orinoco y un corredor vial entre Manaos y Río Negro.
El evento fue organizado por la Coordinadora de las Organizaciones Indígenas de la Cuenca Amazónica (Coica) y la Organización Regional de Pueblos Indígenas del Amazonas venezolano (Orpia).
Contó con el apoyo del Ministerio del Poder Popular para la Cultura, la Defensoría del Pueblo, la Fundación Ford, el Consejo Nacional Indio de Venezuela (Conive), la Federación Indígena del estado Bolívar, la Unión de Comunidades Indígenas Warao y el Instituto Autónomo Indígena de Bolívar.
El IIRSA en VenezuelaEl IIRSA es un mecanismo institucional de coordinación de acciones intergubernamentales de los doce países suramericanos, con el objetivo de construir una agenda común para impulsar proyectos de integración de infraestructura de transportes, energía y comunicaciones. El IIRSA se estableció en agosto de 2000 durante una reunión de Presidentes de América del Sur y Venezuela participa en ocho desarrollos:
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Nicolás Betis, vice coordinador general de la Coica y defensor auxiliar en derechos indígenas de la Defensoría del Pueblo, informó que los asistentes analizaron la cartera de proyectos planteada por la Iniciativa para la Integración de la Infraestructura Regional Suramericana (IIRSA).
Betis recalcó la importancia de que los pueblos amazónicos se constituye en un actor fuerte e importante que “sea tomado en cuenta en los procesos de toma de decisiones, de manera directa, y garanticen el cumplimiento de los derechos que les asisten.”
Juan Carlos Jintiach, coordinador del área de Cooperación Económica Internacional y Desarrollo Autónomo con Identidad de la Coica, afirmó que el taller identificó a los actores claves que están detrás de los megaproyectos de IIRSA, que en su mayoría serán desarrollados en territorios indígenas amazónicos.
Jintiach también resaltó la importancia de analizar los pro y los contra de los proyectos contenidos en el Plan Nacional Simón Bolívar y velar por el respeto al derecho a la consulta y al consentimiento libre, previo e informado .
“Si bien Venezuela como Estado soberano tiene su plan nacional, debemos saber en verdad si esa cartera de proyectos va a fortalecer a los pueblos indígenas o es un paso más a la extinción, a la expulsión o al saqueo de sus recursos naturales” afirmó Jintiach.
Alfredo Rendón, concejal indígena y secretario ejecutivo de la Conive, manifestó que la explotación de la Faja Petrolífera del Orinoco causa impactos en los ecosistemas que han sido conservados muchos años por los pueblos, lo que afecta la convivencia armónica con la naturaleza y la cosmovisión indígena.
Luis Paulino Mundo, Capitán General del sector indígena Cuyuni, ubicado en el Municipio Sifontes, recordó las acciones de protesta que desarrollaron frente al tendido eléctrico que pasó por sus territorios hasta Brasil.
El proceso permitió un acuerdo entre el Estado venezolano y pueblos indígenas, y se creó una comisión interinstitucional para el proceso de demarcación y titulación de los pueblos indígenas, que continúa vigente, indicó.
Paulino Mundo expresó además su preocupación por la minería de gran escala que de manera ilegal realizan extranjeros en su sector y que contaminan los ríos y deforestan los bosques.
Mundo precisó que esa minería destructiva se realiza en la cabecera del río Cuyuní y por el río Chikanan, y ha ocasionado la escasez de alimentos básicos en cuanto pesca y cacería afectando la calidad de vida de las comunidades de San Luis Morichal.
El Ejecutivo nacional decretó once áreas para la explotación de la pequeña minería en el Municipio Sifontes, ubicadas en los sectores conocidos como La Pelota, Bizkaitarra y San Martín de Turumbán, el manejo ambiental de estas áreas no se ha cumplido y el saneamiento del río Cuyuní ofrecido por el gobierno se cumplió parcialmente, y los mineros han retornado.
Ninfa Tividor, coordinadora de Orpia, Expresó su alarma por el proyecto de una arrocera en el estado Delta Amacuro y la construcción del corredor vial entre Manaos y Río Negro en el estado Amazonas.
Tividor insistió en que “debe darse la consulta y participación directa de nuestros pueblos, ya que además nuestra misma Constitución Nacional nos garantiza ese derecho” afirmó.
Juan Carlos Chacón, técnico de la Coica, explicó que en el taller también se realizaron actividades de formación sobre el impacto del cambio climático en los pueblos indígenas, se instruyó sobre el programa de Reducción de Emisiones Derivadas de la Deforestación y la Degradación Forestal en los Países en Desarrollo (Redd) y se les dio a conocer los métodos para medir la captación de dióxido de carbono (CO2) en los árboles.
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Con información del diario de Guayana: http://www.eldiariodeguayana.com.ve/inf-general/4234-indigenas-construyen-estrategia-ante-impacto-de-megaproyectos.html
http://servindi.org/actualidad/48096?utm_source=feedburner&utm_medium=email&utm_campaign=Feed%3A+Servindi+%28Servicio+de+Informaci%C3%B3n+Indigena%29