Comunidades y rondas de La Libertad se reafirman como pueblos originarios

IV Congreso Regional Rondero reunió 800 delegados y aprobó posicionamiento político estratégico. Anuncian su participación en el Paro Nacional Cívico Popular de los Pueblos Originarios que se realizará el 22 de junio y en el Paro Nacional del 9 de julio

Servindi – Ochocientos delegados de los pueblos del departamento norteño de La Libertad, en Perú, reafirmaron su identidad como comunidades y rondas descendientes de pueblos originarios en el IV Congreso Regional Rondero realizado en el Coliseo Inca de la ciudad de Trujillo.

El evento realizado el 20 de junio adoptó un conjunto de acuerdos en relación con el Estado peruano, a la realidad regional y nacional y a los gobiernos locales y gobierno regional.

Participaron delegados comunales y de rondas de Trujillo, Pacasmayo Chepén, Gran Chimú, Otuzco, Sánchez Carrión, Julcán, Santiago de Chuco y Virú.

Una de las decisiones es constituirse como Asamblea de los pueblos originarios, rondas campesinas, comunidades campesinas de La Libertad. En este sentido planteó una relación de coordinación y fiscalización del Estado y todos los niveles de Gobierno, con respeto a la libre determinación y autonomía de los pueblos.

Reafirmaron la defensa de la Mama Pacha o Madre Tierra y la visión del Buen Vivir lo que los lleva a proteger “las lagunas, ríos, manantiales; páramos, bosques secos y de neblina; la flora y fauna, áreas verdes y todos los bienes de la Madre Naturaleza”.

Decidieron la reconstitución de sus territorios ancestrales de forma integral como pueblos y “frenar la parcelación de tierras colectivas”. Precisan que “incluso donde hay propiedad familiar de la tierra, nos reafirmamos en nuestra identidad y autoridad colectiva del territorio”.

También plantean una nueva forma de relación con el Estado y todos los niveles de gobierno; en el marco de un  modelo de Estado y gobierno plurinacional, con respeto de la libre determinación de todos los pueblos o naciones originarias.

Frente a los proyectos extractivos, de infraestructura, energía, mega-represas o cualquier otro proyecto de desarrollo que genere parcelación y destrucción los territorios y el ambiente, o desplazamiento forzoso, exigen el respeto de la integridad territorial y no se utilice la fuerza para imponerlos.

Rechazan la persecución a las autoridades defensoras de los pueblos y exigen que el Estado peruano cumpla la medida cautelar otorgada por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) para proteger la vida e integridad de los 46 líderes y lideresas de comunidades y rondas campesinas, la familia Chaupe y el comunicador indígena César Estrada Chuquilín.

También demandan la liberación de Gregorio Santos Guerrero, injustamente detenido y beneficiario de otra medida cautelar otorgada por la CIDH el 14 de mayo de 2015, a quién se le persigue políticamente por oponerse al megaproyecto minero Conga.

El pronunciamiento del evento regional también demanda la derogatoria de leyes y normas que en la actualidad están generando conflictos sociales en el país como la Ley 30230, la Ley 3941 y el Decreto Supremo 001-2015 EM que atropellan derechos colectivos de campesinos e indígenas sobre sus territorios.

Asimismo, exigen la derogatoria de la Ley 30151 que en la práctica debilita la defensa de los derechos fundamentales de las personas y que genera impunidad, cuando las fuerzas policiales y del orden reprimen y matan a las personas que protestan por defender sus territorios y derechos consuetudinarios de los pueblos.

Anuncian la lucha desde las bases por la vigencia y el respeto a la legalidad de la rondas campesina afín de impedir que el Congreso de la República restrinja sus facultades jurisdiccionales.

A continuación las conclusiones y acuerdos completos del IV Congreso Regional:

Conclusiones y acuerdos del IV Congreso Regional de Rondas Campesinas, Comunales y Urbanas de la La Libertad.

Trujillo, 20 de Junio de 2015

Los más de 800 delegados elegidos democráticamente desde cada una de las bases, representantes de los pueblos originarios, rondas campesinas, comunales y urbanas de Trujillo, Pacasmayo Chepen, Gran Chimú, Otusco, Sánchez Carrión, Julcán, Santiago de Chuco y Virú de la Región de La Libertad, reunidas en el Coliseo Inca del centro histórico de la ciudad de Trujillo, los días 20 de junio del 2015, en el IV Congreso Regional Rondero, se ha llegado a las conclusiones y acuerdos que siguen:

1. Nos reafirmamos como pueblos originarios rondas campesinas, comunidades campesinas y urbanas, descendientes de los pueblos de los Chimú, Virus, Mochicas y los Chanchan, que existían desde antes de la invasión europea; que hemos resistido a lo largo de la historia y que actualmente mantenemos nuestra identidad y tenemos nuestras propias instituciones y autoridades políticas; instituciones económicas como la reciprocidad, minga, trueque; nuestros idiomas, y que actualmente nos encontramos organizados como rondas campesinas, comunidades campesinas y urbanas.

2. Nos reafirmamos en la cosmovisión que compartimos todos los pueblos originarios, que somos parte y debemos respetar y proteger la “Mama Pacha” o Madre Tierra y Mama Yaku o Madre Agua, y los Apus sagrados. Nuestra visión del Buen vivir se da en armonía de la Madre Naturaleza, lo que nos lleva a proteger y defender las lagunas, ríos, manantiales; páramos, bosques secos y de neblina; la flora y fauna, áreas verdes y todos los bienes de la Madre Naturaleza.

3. Reafirmamos la decisión de mantener nuestra identidad y ejercer nuestros derechos como pueblos originarios o indígenas, la libre determinación, autogobierno y autonomía, territorio integral (incluyendo los recursos naturales), derecho y justicia propia; y decidimos mantener y revitalizar nuestra identidad cultural y la práctica de los idiomas originarios entre otros.

Esclarecemos que todos los pueblos originarios, rondas campesinas, comunidades campesinas y urbanos gozamos de todos los derechos de pueblos indígenas, sin exclusión; y que pueden usarse como sinónimos todos estos términos.

4. Decidimos la reconstitución de nuestros territorios ancestrales de forma integral como pueblos; la defensa de la inalienabilidad, imprescriptibilidad e inembargabilidad de los territorios de las comunidades campesinas y de las rondas campesinas; y exigimos frenar la parcelación de tierras colectivas. Incluso donde hay propiedad familiar de la tierra, nos reafirmamos en nuestra identidad y autoridad colectiva del territorio.

5. Decidimos fortalecer la autoridad colectiva, el autogobierno, la autonomía, el derecho consuetudinario y la justicia propia en el ámbito territorial de los pueblos originarios, las rondas campesinas y las comunidades campesinas.

6. Decidimos mejorar nuestra formación y capacitación, con la transmisión de conocimientos de los/as mayores, y promover la participación de mujeres y jóvenes en nuestras organizaciones, y combatir el machismo y toda forma de violencia y discriminación.

7. Como pueblos originarios, rondas campesinas y comunidades campesinas, planteamos una nueva forma de relación con el Estado y todos los niveles de gobierno; en el marco de un modelo de Estado y gobierno plurinacional, con respeto de la libre determinación de todos los pueblos o naciones originarias; con plena participación en la toma de decisiones de los asuntos que nos competen; con consulta y consentimiento respecto de los actos legislativos y administrativos que nos puedan afectar.

8. Nos constituimos como Asamblea de los pueblos originarios, rondas campesinas, comunidades campesinas de La Libertad y planteamos una relación de coordinación con, participación en y fiscalización del Estado y todos los niveles de Gobierno central, regional y locales, con respeto de la libre determinación y autonomía de los pueblos.

Asimismo, nos planteamos como horizonte la constitución de un Estado Plurinacional a través de un proceso constituyente donde participemos todos los pueblos o naciones con igual dignidad; con garantía de la participación de mujeres y jóvenes.

9. Con relación al Gobierno central, regional y local, exigimos el respeto y la aplicación efectiva de nuestros derechos, ya reconocidos en la Constitución, el Convenio 169 de la OIT sobre pueblos indígenas, ratificado por el Perú y en vigor desde el 2/2/1995, la Declaración de las Naciones Unidas sobre los derechos de los pueblos indígenas, las decisiones de la Comisión y Corte Interamericana de Derechos Humanos; la Ley Orgánica del Gobiernos Regionales Nº 27867, la Ley de Rondas Campesinas Nº 27908, y demás normas que nos corresponden y favorecen.

10. Ante la inseguridad comunal y ciudadana en las principales ciudades de la región la Libertad se concientizara a los pobladores para que se organicen en rondas urbanas.

11. Decidimos fortalecer nuestras acciones de control y fiscalización del Gobierno Central, Regional y locales, para que cumplan bien sus funciones, con compromiso, respeto de nuestros derechos y sin corrupción.

12. Exigimos que el Estado respete la integridad territorial y el consentimiento de los pueblos; y que no utilice la fuerza para imponer proyectos extractivos, de infraestructura, energía, megarepresas o cualquier otro proyecto de desarrollo que genera parcelación y destrucción los territorios y el ambiente, o desplazamiento forzoso.

13. Denunciamos y rechazamos la persecución de autoridades y miembros de pueblos originarios, rondas campesinas, comunidades campesinas y nativas; en particular de quienes administran la justicia propia, y de quienes defienden los derechos al territorio y al agua, como en el caso de quienes están procesados y presos por administrar justicia consuetudinaria o por oponerse al megaproyecto extractivos, madereros, petroleros, mineros y otros proyectos en el “país”.

14. Exigimos que el Estado cumpla con la medida cautelar otorgada por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos para proteger la vida e integridad de los 46 líderes y lideresas de comunidades y rondas campesinas, la familia Chaupe, el comunicador César Estrada y de Gregorio Santos Guerreo que también es un beneficiario de una medida cautelar que le otorgó la CIDH el 14 de mayo del 2015, en riesgo por oponerse al megaproyecto minero Conga. Asimismo, demandamos la atención de las personas que han quedado heridas o familiares de quienes han muerto en manos de las fuerzas de seguridad del Estado. Nuestra solidaridad y respaldo a todos los pueblos del Perú, que luchan por defender sus territorios en especial a los pueblos del Valle el Tambo de la Provincia de Eslay-Arequipa.

15. Las bases y toda su estructura orgánica hasta la CUNARC-P, asumen la responsabilidad de la propaganda intensa y campañas de educación e información para fortalecer la lucha en defensa de la justicia rondera, la vida, el agua, el territorio de uso ancestral, y a nivel nacional la soberanía de la patria.

16. Hacer efectivo la profundización del su Estatuto rondero, marco legal que los ampara y protege como pueblos originarios en todas las regiones, a través de fórums, encuentros y escuelas de capacitación.

17. Derogatoria de Leyes y normas que en la actualidad están generando conflictos sociales en el país “Ley 30230, Ley 3941 y Decreto Supremo 001-2015 EM que atropellan derechos colectivos de campesinos e indígenas sobre sus territorios, normas que son arbitrarias y anticonstitucionales. Así mismo la derogatoria de la Ley 30151 que en la práctica debilita la defensa de los derechos fundamentales de las personas y que genera impunidad, cuando las fuerzas policiales y del orden reprimen y matan a las personas que protestan por defender sus territorios y derechos consuetudinarios de los pueblos.

18. Respaldamos la propuestas de la CUNARC-PERÚ en donde se exige se reconozcan a las rondas campesinas como pueblos originarios o indígenas y se le considere dentro de la modificación del artículo 16° del Código Penal. Así, el tenor del artículo deberá ser el siguiente:

“Artículo 16.- La ley penal no se aplica cuando las autoridades de las pueblos originarios o indígenas, sean comunidades campesinas, rondas campesinas o comunidades nativas, ejerzan jurisdicción especial de conformidad con el artículo 149 de la Constitución Política”.

19. La bases ronderas, distritales, provincial respetaran la estructura orgánica e institucionalidad de las rondas campesinas de la Federación Regional de Rondas Campesinas, Comunidades campesinas y Urbanas de La Libertad y de la CUNARC-P.

20. Exigir la Libertad de nuestro compañero Gregorio Santos Guerrero, injusta y arbitrariamente detenido por prisión de los grupos de poder económico.

21. Desde cada una de nuestras bases debemos luchar por defender la unidad de la ronda campesina, fortaleciéndolas. Condenar la actitud de los divisionistas de la noble institución rondera.

22. Se ratifica la unidad, autonomía, independencia e institucionalidad de las rondas campesinas y no permitir que nadie actué al margen del Estatuto y exigir el pleno respeto del mismo. Toda actividad que se hagan a espaldas de la estructura orgánica (distritales, provincial y regional y de la CUNARC-P), carece de legitimidad. Se asume la defensa y cuidado institucional de las rondas campesinas, para ello las bases de los órganos intermedios en cada evento congresal o asamblea de rondas campesinas ratificaran ser base de la CUNARC-PERÚ.

23. No se les considera miembros de las rondas campesinas a apersonas que promuevan el divisionismo, por intereses particulares ajenos a la noble institución rondera.

Respecto a la realidad nacional y regional, el Congreso aprobó:

1. Esclarecer desde nuestras bases sobre la problemática nacional y regional, forjando la toma de conciencia para luchar contra el modelo neoliberal que es el causante del agravamiento de los problemas estructurales del Perú. Luchar contra la corrupción en todos sus niveles y la violencia delincuencial, denunciando y exigiendo sanciones para los ladrones de cuello y corbata y las mafias organizadas. Denunciar la traición de Ollanta Humala.

2. Realizar campañas de esclarecimiento en cada una de nuestras bases sobre el significado de las elecciones del 2016 y la imperiosa necesidad de coadyuvar a construir la más amplia unidad de las fuerzas populares para presentar candidaturas unitarias en nuestra región y a nivel nacional. Los peruanos honestos y consientes debemos unirnos para enfrentar y derrotar a los partidos de la derecha. Aportar a la construcción de una alternativa de cambio que considere a la mediana y pequeña agricultura (agricultura familiar), como eje del desarrollo nacional y regional.

3. Luchar desde nuestras bases por la vigencia y el respeto a la legalidad de la rondas campesina afín de impedir que el congreso de la republica apruebe el dictamen de la Comisión de Justicia. En lo inmediato participaremos en el PARO NACIONAL CÍVICO POPULAR DE LOS PUEBLOS ORIGINARIOS, que se realizara el lunes 22 de junio. Participar PARO NACIONAL DEL 9 DE JULIO.

4. De acuerdo al Estatuto todo rondero y rondera, tiene derecho a participar en la vida política, económica, social y cultural de su localidad región y país, impulsando el nuevo modelo de desarrollo de acuerdo al derecho a la libre determinación y el buen vivir de los pueblos.

5. Desde las bases forjar nuestros líderes ronderos para que nos representen como verdaderos políticos, ajenos a los politiqueros tradicionales de los partidos de derecha.

6. Exigir el retiro de las Tropas de EE.UU. de territorio peruano.

Con relación a los gobiernos locales y regional

1. El IV Congreso Regional rondero, de acurdo al Artículo 6 de la Ley 27908 de Rondas Campesinas, planteamos una relación de coordinación con, participación en y fiscalización del Gobierno regional y locales; y proponemos sostener reuniones ordinarias y extraordinarias con el fin de que nos informen del destino de los ingresos y egresos de los recursos económicos destinados para la inversión pública.

2. Demandamos que el Gobierno Regional adopte una política pública regional consultada sobre la identidad y diversidad cultural; que parta de la historia de los pueblos originarios; que recoja nuestra cosmovisión y saberes consuetudinarios; que fomente y que garantice la educación intercultural en la región.

3. Que los Gobiernos Locales y Regional respete nuestras formas de vida, desarrollo y buen vivir, y dé prioridad a nuestras actividades sostenibles de agricultura, agroforestal, ganadería y turismo, que dan trabajo y permiten mantener la Madre Tierra; y no la minería contaminante.

4. Demandamos la participación de los pueblos originarios en el “presupuesto participativo” y que los gobiernos locales y Gobierno Regional separen un presupuesto específico para la implementación del Plan de Desarrollo y Buen Vivir de los pueblos originarios, rondas campesinas, comunidades campesinas, considerando nuestras prioridades.

5. Demandamos la realización de un Diagnóstico de pasivos ambientales y la identificación de empresas responsables, en zonas de actividades extractivas mineras, para la reparación de los mismos; y exigimos el control y la coordinación entre las entidades correspondientes, para que no se produzcan daños en el futuro.

6. Exigimos el mejoramiento y control de los servicios públicos de salud, educación y otros, que cuenten con nuestra participación; que sean accesibles y de calidad, con respeto de nuestra cultura; y sin discriminación de los pueblos.

7. Solicitamos que los gobiernos locales y el Gobierno Regional destinen locales para la Asamblea de Pueblos originarios, rondas campesinas y comunidades campesinas en la Región de la libertad; a fin de que podamos reunirnos de forma autónoma, y desarrollar actividades para nuestro fortalecimiento y formación; y recursos para alojamiento, alimentación y desarrollo de actividades.

8. Hacer llegar los acuerdos y conclusiones del IV Congreso Regional rondero de la Federación de Rondas Campesinas de la Libertad a las autoridades locales y regional para su información y a medida de la coordinación cumplan y consideren dichos acuerdos, así mismo difundir a todas las bases.

Trujillo, 20 de junio del 2015.

Deixe um comentário

O comentário deve ter seu nome e sobrenome. O e-mail é necessário, mas não será publicado.